NOTA PREVIA:
- Como reza el título, esto es una crónica de la reunión, no un acta. El acta oficial será alzada por el Secretario-M, trascrita en el correspondiente libro de actas y archivada para el uso que se estime oportuno darle, junto con los sellos, lacres y pergaminos de la Asociación. Ante cualquier disparidad de criterios entre esta crónica y el acta oficial, prevalece a todos los efectos el acta oficial.
INTRODUCCIÓN:
Antes de proceder a la crónica de la reunión conviene puntualizar, aunque solo sea de forma rápida y escueta, algunas cuestiones relativas a Symposium para poder contextualizar mejor el relato
- Symposium es una Asociación sin ánimo de lucro que tiene prohibido estatutariamente recibir ningún tipo de subvención pública o privada. Está incluso prohibido solicitar cualquier tipo de subvención en metálico o en especie.
- Todos los miembros forman parte de la directiva y deben poseer como mínimo un cargo. Los cargos imprimen carácter, son personales, intransferibles, vitalicios e irrenunciables. Ningún miembro puede ser despojado, ni revocado de sus cargos bajo ningún concepto. Se pueden acumular cargos pero nunca renunciar a ellos.
- Son lenguas oficiales de la Asociación: el castellano, el valencià, el latín clásico, el griego arcaico y el sánscrito. Hay que reconocer que nunca se nos ha presentado la oportunidad de redactar un acta en sánscrito, pero, por si acaso, hemos querido dejar abierta esa posibilidad, ya que nunca se sabelo que puede pasar en estos tiempos tan convulsos.
- Las decisiones se toman obligatoriamente por unanimidad. En el caso de que algún miembro intuya que ésta no va a darse, puede solicitar la posibilidad de votar si procede votar, en el caso de que en esa primera votación el resultado no sea por unanimidad, no procede votar lo que se quiere votar y se deja el tema en suspenso para que madure con el tiempo.
- Dentro de Symposium actualmente hay dos tendencias claramente definidas, la de los que han sellado un pacto verbal de longevidad hasta los 120 años como mínimo, y los que aún no lo tienen claro y por lo tanto aún no se han adherido.
- Symposium está bajo la advocación y protección de san Symposio por decisión soberana de sus miembros reunidos en cónclave a tal efecto.
- La imagen de san Symposio fué seleccionada tras un riguroso casting que se prolongó más de dos años, en el que participó lo más granado de la imaginería religiosa. Finalmente, el ganador fué un fraile desconocido -en el que todos vimos a san Symposio redivivo- tonsurado, como mandan los cánones, vestido con un hábito marrón chocolate por el que le asoma la cabeza como única parte visible de su anatomía y que lleva puesto un delantal azul que enmarca y protege su orondo abdomen. En su mano izquierda sostiene una pequeña caja rellena de no se sabe bien qué -pero que nosotros concluimos enseguida que era sal- y con la derecha hace ademán de repartirla generosa y desinteresadamente a un público ávido y desconocido.
- La imagen del santo es una pequeña escultura hueca de unos 30cm que se abre por la mitad encajando perfectamente la parte del torso con la zona abdominal. En la cavidad interior se custodian las dos reliquias más preciadas de Symposium: los estatutos, fotocopiados y reducidos convenientemente para que quepan, y los escasos fondos económicos, fruto de los beneficios obtenidos por la venta de participaciones de la lotería nacional en Navidad.
- Como san Symposio es un santo global antes de entronizarlo y asignarle el rango y primacía que ostenta, hubo que proceder a un necesario retoque de peluquería, consistente en la extracción de la pequeña corona aúrea de plástico que lo adornaba y con la que se presentó al casting. Actualmente luce una cabeza calva, despejada y despojada de cualquier adminículo.
- El lema de san Symposio es totus coquus. Y el de la Asociación " Que san Symposio nos conserve la gana".
- Hace unos años San Cucufato fué purgado del santoral romano por la Curia vaticana, momento que aprovechó la Asociación para añadirlo, según consta en la correspondiente acta, al propio santoral. Así pues desde la citada fecha las oraciones, ruegos y súplicas dirigidas a San Cucufato deben canalizarse obligatoriamente a traves de la Asociación
- san Symposio siempre va poscedido por Herirías. Pero, eso es ya otra historia... que, continuará...
- NOTA: Por decisión ortográfica y gramatical de Symposium, constituido a tal efecto como Real Academia de la Lengua, se instituyó que bajo cualquier circunstancia léxica, sin excepción, el "san" de san Symposio iría siempre en minúscula. Escribir "S"an Symposio constituiría una falta ortográfica grave en los escritos de la orden.
CRÓNICA: Orden del día
- Aperitivo: Cacahuetes + cerveza
- Se inicia la sesión pasando lista a los asistentes: S-M-P-O-S-U-M y excusando a los ausentes: Y-I-* por motivos de salud directa o indirecta.
- A continuación se procede a hacer un rápido y breve informe sobre el estado de salud de todos los miembros. M especula si todos estos altibajos y achaques no se deberán a que la imagen de san Symposio está desde hace ya bastante tiempo en paradero desconocido. Se indaga sobre su posible ubicación. Todos apuntan que debe estar en posesión de O-S, que lo niegan vehementemente y ponen como prueba la reciente operación de O. Por descarte, se deduce que debe estar en la Sede de I-*. Como lamentablemente no están presentes, sigue la duda que no se despeja.
- S manifiesta que últimamente está perdiendo muchas cosas y San Cucufato no atiende sus ruegos, en contra de lo que es habitual en él. Considera inadmisible que un santo de la Casa tenga un comportamiento tan poco profesional. El Presidente S zanja la cuestión manifestando que se encargará personalmente del tema y de averiguar ese comportamiento imprevisible y errático del santo.
- Ensalada de lechuga y canónigos con ángulas al ajo laminado y anacardos
- A continuación se abre un turno de palabra para despotricar y despacharse con ganas contra las distintas Administraciones; municipal, autonómica, nacional y europea. Evidentemente los que piensan que la cosa no es para tanto, callan y aguantan el chaparrón sin rechistar - como debe ser- mientras, intentan llevar la conversación por otros derroteros y en cuanto pueden introducen cuñas sobre la pertinaz sequía, lo mal que está el tráfico en estas fechas, la nueva colección primavera-verano, y algún que otro tema menor. Finalizados los cacahuetes del aperitivo y aliviados por el despotrique, es el momento de pasar al segundo punto del orden del día:
- Cordero al horno a la panadera con patatas + arroz blanco con anacardos y pasas
- En primer lugar se valora muy positivamente el plato servido, presentación, sabor, aroma, textura, etc.Seguidamente se inicia un vivo debate sobre la conveniencia de utilizar una foto agraciada en la lápida mortuoria. Se pone como ejemplo un caso conocido en el que el esposo aparece con una fotografía 30 años más joven mientras que su querida esposa aparece con la edad real del óbito, dando la falsa impresion a cualquier observador de que se trata de madre e hijo. Se lanzan preguntas capciosas y sibilinas ¿Y si él está de fallero, debería ir ella también de fallera ? o ¿Podría elegir otro traje regional que la favoreciese? o ¿Se debería sustituir la foto de él por otra más acorde con los presumidos gustos de ella? La polémica, lejos de amainar, arrecia al imaginar la posiblidad real de que ella luciese con teja y mantilla, propia de una clavariesa de los Dolores, mientras que él, con una mentalidad mucho más abierta y moderna, apareciese con piercings y tatuado. Se invoca la sacrosanta libertad de cada uno a elegir la foto más adecuada para esmaltarla en su lápida - se citan derechos constitucionales - pero por otra parte se valora como muy desproporcionado e insufrible imponerle la imagen desgarbada, a su pareja, por toda la eternidad.
- Se produce un momento de cierta tensión cuando O afirma que tomó la comunión estando la familia de luto y U le replica que eso no era cierto ya que se estuvo acompañado por sus hermanas y se realizó una gran fiesta familiar, cosa de la que U, que tenía por aquel entonces 7 años, aún conserva un vivo recuerdo. Finalmente O tras mucho revolver, encuentra y nos muestra una foto de su primera comunión en la que efectivamente actúa como madrina su tía, a la que llamaremos Paula, -que por cierto esra más mala que un tiro- y como padrino su tio, santo esposo de Paula - que, no olvidemos, era más mala que un tiro-
- A medida que los platos se van vaciando la discusión va subiendo de tono hasta que el Presidente S inquiere sobre la forma en que cada uno quiere pasar al otro mundo. Por unanimidad todos los presentes se manifiestan a favor de la incineración; con lo cual la foto que se elija para el último tránsito se considera irrelevante. Se zanja la discusión en el acto y el debate, y se pasa al siguiente punto:
- Postre: Tarta de calabaza con coco y chocolate decorada con cítricos
- M-M manifiestan que puede darse por terminada su amistad con un conocidisimo escritor local y su familia. Tras constatar que durante ocho años ininterrumpidos, no han tenido noticias una familia de la otra, puede considerarse finiquitada la gran amistad que les unía. Especulando sobre las causas del cese de relaciones, M recuerda que los dos últimos encuentros fueron bastante traumáticos y tal vez la posible causa de la ruptura de relaciones.
- El primer desencuentro sucedió en Nochevieja, las dos familias iban a celebrar la entrada del Año Nuevo en casa de M-M. El escritor se propuso como cocinero, voluntario, para preparar la cena, a base de conejo al horno. Llegaron tarde a casa y además el horno no iba lo rápido que la receta exigía. Esto en realidad no constituye ningún problema insalvable, pero, el escritor - personaje extremadamente maniático- había decidido que, como todos los días, a las 12 en punto de la noche ya debía estar acostado en su cama- cosa que M-M desconocían- con lo cual se aceleró el proceso de cocción y todo se precipitó. Resultando un conejo requemado por fuera y crudo por dentro que debió comerse de prisa y corriendo para que el escritor pudiese estar en la cama puntualmente a las 12. Las 12 uvas no lograron enmascarar el regusto desagradable a conejo crudo que persiguió a M-M hasta pasado Reyes, pero sí desatascar el aparato digestivo aunque de forma un tanto explosiva y tormentosa.
- El segundo y definitivo sucedió en la casona señorial del susodicho escritor a la que fueron invitados M-M con los niños para pasar ambas familias un día de asueto. Conocidas por el escritor las habilidades agrícolas de M no se le ocurrió otra cosa que pedirle, si por favor podía erradicarle algunas malas hierbas que crecían en el jardín. M solícito no lo dudó un instante y al día siguiente se presentó con una mochila de pulverizar y una botella de potente herbicida, despachándose a gusto con las malas hierbas como el Quijote con los molinos. Una semana más tarde, M fué convocado por el escritor a la casona y le mostró el resultado de su celo herbicida. Todas las especies vegetales del jardín, sin excepción, desde las verdolagas hasta la glicina centenaria -orgullo de su dueño y seña de identidad de la casona-, habían adquirido unos intensos e inquietantes matices otoñales, signo inequívoco de la verdulería de la casona cultivada con amor y mimo desde el siglo XVIII había llegado al final de su ciclo vital. Meses más tarde, M se enteró que los tristes despojos del otrora vergel habían sido arrancados de cuajo, y, donde lucía un frondoso jardín, refulgía ahora una espesa capa de cemento. Fin de la historia y de una profunda amistad.
- Tras esta triste historia de amistad truncada, M relata una broma que le hizo a su madre y le costó - a ésta- una subida de azúcar. Su madre -mujer de arraigadas ideas sobre la ley y el orden, firmes creencias religiosas y nulo sentido del humor- pidió a M que le sintonizase el reloj-despertador, ya que ella era incapaz de hacerlo debido a su avanzada edad. M con alevosía accedió a las súplicas de su madre pero le dejó conectada la SER, para observar su reacción. Ésta no se hizo esperar, como no podía ser de otra manera, a la mañana siguiente - exactamente a las 7'30h - se manifestó de manera fulminante bajo la forma de una subida de azúcar que exigió su ingreso inmediato en urgencias.
- Tras el relato de M, S detalla que - también es casualidad - a su tía, mujer esta de profundas convicciones obreras y de clase y nulo sentido del humor, le ocurrió algo parecido. Pero bajo el síndrome de una subida de tensión, provocada por una sintonía abusiva de la COPE. En este caso fué ella misma la responsable de su desgracia al negarse a cambiar de cadena; a pesar de los innumerables consejos de S, que se venía venir lo que iba a pasar y temía una reacción alérgica. Claro! ocurrió lo que tenía que ocurrir, palpitaciones, taquicardia, vista al Ambulatorio local y tensión al 19. Desde entonces y por prescripción médica tiene prohibido escuchar la COPE antes de tomarse la pastilla de la tensión y solo puede sintonizarla en días alternos. Se pasa al último punto del orden del día.
- Café, infusiones y licores
- Es el momento de poner la fecha del próximo Symposium que organizarán M-M. Pero antes, hay pendiente una paella que I-* prometieron hace unos dos años y que aún, por diversas razones, no ha podido ser materializada. Se le sugieren al Secretario, como posibles fechas, el 1 o 27 de abril. M deberá hacer las gestiones y en función de la respuesta a la paella podrá poner la fecha del próximo Symposium, fecha que se comunicará en tiempo y forma a todos los miembros de la fraternidad.
- Y ya sin más asuntos que tratar se levanta la sesión siendo las las 2 de la madrugada.