jueves, 20 de junio de 2013

Guacamole con nachos

Ingredientes: (Muy fácil - T: 15')
        
  • 3 aguacates maduros
  • 2 tomates medianos maduros
  • un trozo de pimiento al gusto
  • un trozo de cebolla al gusto
  • un chorrito de zumo de limón
  • un chorrito de aceite de oliva
  • sal, pimienta, pimentón y cominos molidos al gusto
  • nachos -para acompañar-
Preparación :
  1. Pelamos los tomates, los partimos por la mitad y les quitamos las semillas dejando solo la pulpa. La troceamos groseramente y la pasamos a una ensaladera holgada
     
  1. Rallamos el pimiento y la cebolla sobre el tomate (Cuidado con no pasarse con la cebolla).
  2. Pelamos los aguacates, troceamos la pulpa y la unimos al resto de las verduras . Con un mazo de mortero lo machacamos todo groseramente hasta conseguir una masa trabada, más o menos grumosa según el gusto de cada uno.
     
  1. Salpimentamos, añadimos el zumo de limón, el aceite, el pimentón (dulce o/y picante) y el comino; al gusto de cada uno. Mezclamos bien con el mazo. Tapamos con film transparente de cocina y guardamos en la nevera hasta el momento de servir
     
NOTAS:
  • Originalmente la textura del guacamole es  grumosa, así pues no conviene -para acabar antes- triturarlo todo con la batidora eléctrica
  • El comino molido debe apreciarse en el sabor del guacamole.
  • El guacamole original es picante. Esta versión es suave, pero si quereís intentar darle un toque picante, probad con Cayena, guindilla, chiles, ajís o pimentón picante . De todas manera mucho cuidado, sobre todo con los primeros intentos
  • Cuidado con la cantidad de cebolla y pimiento porque ambos suelen aniquilar el sabor del resto de los ingredientes.
  • En algunos lugares de América al aguacate se le llama también palta; desde muy antiguo su ingesta ha tenido connotaciones eróticas y se le han atribuido efectos afrodisíacos. Aguacate proviene de ahuacatl, que era la palabra utilizada por aztecas y nahoas. En la lengua original, significaba testículo, con lo cual se hacía una doble referencia: a la forma del fruto y a su poder (?) para despertar y reavivar la pasión sexual. Los cronistas de Indias, viajeros y naturalistas hicieron del fruto grandes elogios, haciéndose eco de las tradiciones indígenas. Percatados de su alto valor nutritivo y energético lo enviaron a la Península, donde se aclimató facilmente en la costa mediterránea -Se conservan documentos del siglo XVI en los que ya consta que había aguacates adultos el jardín del arzobispo de Valencia- Se sabe también que Luis XV de Francia se aficionó a ellos al final de su reinado con la esperanza de reavivar su declinante capacidad amorosa. La bonne poire (buena pera), como la denominaba el rey, le llegaba desde Haití y alcanzaba precios exorbitantes.

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